
Robots que recolectan tomates, drones que riegan o inteligencia artificial para planificar la compra y reducir los desperdicios. Cómo la tecnología puede contribuir a erradicar el hambre y mitigar el impacto ecológico de la agricultura es el eje de una exposición que acaba de abrir el Museo Técnico de Viena.
Sophie Gerber, comisaria de la muestra Foodprints, explica que el sector agrícola debe incorporar innovaciones tecnológicas para reducir la contaminación y aprovechar de una manera más eficiente los recursos naturales.
Mediante experiencias interactivas e instalaciones multimedia, la exposición presenta algunos de estos enfoques innovadores, como robots capaces de controlar la salud de los suelos y las plantas o sistemas de riego con drones que reducen el uso de pesticidas y previenen los daños de las cosechas.